Arquitectura y Escultura: Pilares del Arte Griego Clásico

Clasificado en Arte y Humanidades

Escrito el en español con un tamaño de 4,38 KB

El Templo Griego

Su estructura es rectangular, que alberga la efigie divina, precedida de un pórtico delantero abierto, que también se le llama pronaos, y secundada en el extremo opuesto por otro pórtico cerrado llamado opistodomo. Este núcleo longitudinal y simétrico se eleva sobre una plataforma de 3 gradas, donde el peldaño superior, que recibe el nombre de estilobato, aguanta el peso del edificio.

Alrededor de las dependencias litúrgicas se habilitó un pasillo exterior, también llamado peristasis, delimitado por columnas, cuyo número, presencia y distribución en los ejes cortos y largos ofrece una triple clasificación. La fachada principal se disponía siempre en uno de los ejes cortos y, de acuerdo con el número de columnas que exhibe el templo, puede ser distilo, tetrastilo, hexastilo, octastilo, decastilo, y así sucesivamente. Si solo presenta columnas en la fachada principal es prostilo, pero si estas se proyectan en su frente posterior se le llama anfiprostilo. Si está rodeado en sus 4 costados por una fila de columnas recibe el nombre de periptero, mientras que si la hilera es doble entonces se le llama diptero.

La arquitectura es arquitrabada y el material utilizado fue el mármol. Una policromía final en tonos rojos y azules realzaba el edificio.

Templos Destacados

  • Delfos
  • Poseidón
  • Artemisa

El Partenón

Es un templo octastilo, anfiprostilo y periptero. Sigue siendo el emblema universal del arte griego. Se concibió como expresión del agradecimiento que sentían los atenienses por la diosa Atenea, que les había conducido a la victoria sobre los Persas. El Partenón se construyó entre el 447 y el 438 a.C.

Los Frontones

El frontón oriental representaba el nacimiento de Atenea. El tema propuesto para el frontón occidental fue el certamen que se convocó para elegir al Patronato del Ática.

Las Metopas

Las metopas son 92, que se corresponden con las fachadas menores situadas en los lados este y oeste, y con los flancos mayores orientados al norte y al sur. Ilustran 4 ciclos míticos en los que Atenea participó con resultados favorables:

  • la gigantomaquia
  • la amazonomaquia
  • la guerra de Troya
  • la centauromaquia
El Friso de las Panateas

Las Panateas menores se intercalaban con las mayores, que tenían lugar una vez cada 4 años, coincidiendo con el año de las Olimpiadas. Las doncellas entregaban a los sacerdotes un peplo que habían tejido para que revistiesen a la diosa.

La Escultura Griega

El principal problema que plantea la escultura griega es la falta de piezas originales. Se utiliza el mármol y el bronce. La plástica griega es conocida por copias en mármol del periodo romano que los césares y la aristocracia del imperio ordenaron reproducir para decorar sus palacios, villas, termas y ciudades.

El segundo problema es la policromía. Todas las esculturas en mármol estaban pintadas, empleándose postizos en los bronces: láminas de plata, incrustaciones de pasta vítrea y rodetes de cuero.

Los griegos reprodujeron la realidad basándose en las relaciones numéricas que la inteligencia cree reconocer en el cuerpo humano y aplicaron tres conceptos a la estatua:

  • la armonía de proporciones
  • el principio de diartrosis
  • la postura del contraposto

Existen otras esculturas llamadas criselefantinas: estatuas de marfil u oro.

El arte es autónomo: es independiente de la religión; el artista reproduce la realidad, la escultura se basa en el hombre. La mayor parte de las esculturas son desnudos.

Fijaron como módulo la cabeza y variaron el canon de belleza ideal del cuerpo humano con el transcurso del tiempo: la proporción armónica fue de 7 cabezas y más tarde se elevó a 8.

Concibieron el desnudo como un esqueleto perfecto regido por la movilidad de las articulaciones; este principio de la diartrosis les hizo acentuar la división entre el tronco y las extremidades y dentro del torso marcaron los pectorales, la cintura y el pliegue inguinal.

Finalmente, rompieron la ley de frontalidad al adoptar la postura del contraposto, donde una pierna actúa de sostén y la otra se flexiona, desnivelándose la línea recta de las caderas.

Entradas relacionadas: