Ensayos y Pruebas en Diseño e Ingeniería

Ensayos Obligatorios del Hormigón Según la EHE

Para establecer la dosificación adecuada, el constructor generalmente debe realizar ensayos previos en laboratorio. El objetivo es asegurar que el hormigón resultante cumpla con las condiciones exigidas en la EHE (Instrucción de Hormigón Estructural).

Estos ensayos se realizarán en laboratorios especializados antes de comenzar las obras. Se fabricarán al menos cuatro series de probetas procedentes de amasadas distintas.

El objetivo principal es establecer la dosificación que se empleará, considerando los materiales disponibles, los aditivos que se utilizarán y las condiciones de ejecución previstas.

En los casos en que el constructor pueda justificar documentalmente los materiales, la dosificación y el proceso de ejecución previsto, y se pueda conseguir un hormigón que posea las condiciones adecuadas, en particular la resistencia exigida, se podrá prescindir de los ensayos previos.

Pruebas en Instalaciones de Agua con Tuberías de Acero Galvanizado

La empresa instaladora está obligada a efectuar una prueba de resistencia mecánica y estanqueidad de todas las tuberías, elementos y accesorios que integran la instalación. Todos sus componentes deben estar vistos y accesibles para su control.

Para iniciar la prueba, se llenará de agua toda la instalación, manteniendo abiertos los grifos terminales hasta que se compruebe que la purga ha sido completa y no queda aire. Luego, se cerrarán los grifos que han servido de purga y el de la fuente de alimentación.

A continuación, se empleará la bomba, que ya estará conectada, y se mantendrá su funcionamiento hasta alcanzar la presión de prueba. Una vez acondicionada, se procederá de la siguiente manera:

Para las tuberías metálicas, se consideran válidas las pruebas realizadas según se describe en la norma UNE 100 151: 1998. Esta norma regula:

• Una prueba preliminar de estanqueidad con agua sin presión, verificando todas las uniones.
• Una prueba de resistencia mecánica con agua hasta el valor de prueba (que será 2 veces la presión más efectiva de trabajo a la temperatura de servicio, siendo como mínimo 6 bar). Dicha presión debe permanecer constante y se realizará un reconocimiento de todas las uniones para comprobar que no existe fuga.

Se recomienda mantener la presión de prueba durante un tiempo de 12 o más horas para obtener una cierta garantía de resistencia a la fatiga de las uniones.

Pruebas en Instalaciones de Agua con Tuberías de Acero Galvanizado Según la NTE

Los controles a realizar son:

• De estanqueidad: Consiste en someter la red a una presión doble de la de servicio, cuando esta sea menor de 6 atmósferas, e igual a la de servicio más 6 atmósferas, si esta es mayor a 6 atmósferas, manteniendo la presión durante 2 horas desde el comienzo de la prueba. El número de controles es del 100 por cien en conductos y accesorios.
• De funcionamiento: Se comprobarán todos los grifos, flexores y llaves de paso de la instalación. No se aceptará si el funcionamiento es deficiente.

Descripción de la Prueba de Cubierta

Esta prueba consiste en la inundación de la cubierta o, si esto no es posible por la forma constructiva de la cubierta, en el rociado de la misma.

Sirve para comprobar la correcta impermeabilización mediante la comprobación de la no aparición de humedades debajo de la cubierta, en los muros o tabiques colindantes, y para comprobar la correcta formación de las pendientes al verificar la ausencia de estancamiento de agua en alguna zona tras el desaguado de la cubierta.

Se realizará terminada la cubierta, antes de ejecutar los acabados de las estancias situadas inmediatamente bajo la cubierta y con la instalación de saneamiento, si se evacua a través de ella, terminada y en condiciones de evacuar el agua de la prueba.

Si se puede inundar la cubierta, se procede al taponamiento de los desagües con algún sistema que permita su evacuación si el nivel de agua se eleva por encima del nivel requerido.

Normalmente, se inunda unos centímetros por debajo del punto más alto de la entrega más baja de la impermeabilización en los paramentos, sin sobrepasar la carga de agua de los límites de resistencia de la cubierta. Se deja en esa situación durante 24 horas. Pasado ese tiempo, se destaponan los desagües progresivamente para no causar daño a las bajantes y se comprueba que el agua se evacua correctamente, no quedan zonas de encharcamientos y no aparecen humedades en el plano inferior ni en paramentos colindantes, ni transcurridas otras 24 horas.

Si no es posible la inundación, se realiza un rociado durante 48 horas mediante dispositivos de rociado debidamente colocados para cubrir toda la zona de ensayo.