Evolución de la Agricultura Comercial en España: Siglo XIX
Clasificado en Geografía
Escrito el en español con un tamaño de 2,69 KB
Avances en la Agricultura Comercial en España Durante el Siglo XIX
La Transformación del Paisaje Agrario
A partir de la segunda mitad del siglo XIX, la costa mediterránea española experimentó una profunda transformación en su sector agrícola. Se impuso una agricultura orientada a la comercialización, tanto para el mercado interior como para la exportación. Cultivos como la vid, los cítricos, el arroz y la caña de azúcar se generalizaron, junto con otros productos como los frutos secos, el aceite de oliva y el esparto.
Aunque los grandes cultivos seguían siendo el cereal, el olivo y la vid, se observó un notable aumento de la superficie dedicada a frutales y a cultivos de regadío. La expansión del ferrocarril favoreció esta diversificación del panorama agrario.
El Auge y la Crisis del Viñedo
La reducción del cultivo de cereal se debió a su bajo rendimiento en comparación con la expansión del viñedo. La producción de uva, aguardientes y vinos experimentó un crecimiento espectacular a finales del siglo XIX. Entre 1850 y 1875, España triplicó el volumen de exportación de vinos a Europa, aprovechando la crisis de la filoxera que asoló los viñedos franceses. De hecho, entre 1870 y 1880, España se convirtió en la primera potencia mundial en producción vinícola.
Sin embargo, este crecimiento fue circunstancial. La llegada de la filoxera a España también provocó una dura crisis en el sector. Entre 1892 y 1896, la exportación de vino se redujo en más de un 40%.
El Olivar y los Nuevos Cultivos
El olivar también experimentó un aumento del área cultivada, especialmente en Andalucía, Cataluña y el Bajo Aragón. Pero el hecho más notable de este período fue el gran crecimiento de la superficie dedicada a frutales y a cultivos de regadío. En las regiones mediterráneas, la proximidad de importantes ciudades y zonas industriales generó un mercado consumidor que estimuló la aplicación de métodos modernos de cultivo. El crecimiento de estos productos se reflejó en el incremento de sus exportaciones.
El Cereal y las Expectativas Frustradas
A pesar de estos avances, seguía predominando el cultivo cerealista tradicional, con una parte importante de su producción destinada a la exportación. Sin embargo, las expectativas de los terratenientes de convertir a España en el granero de Europa se vieron frustradas al finalizar los conflictos europeos. El precio del grano español no podía competir con el de los cereales franceses, alemanes y británicos.