Filosofía Post-Aristóteles: Ética, Imperio Romano y Neoplatonismo
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Con Alejandro Magno (cuyo maestro fue Aristóteles) se acaba la importancia de las polis griegas y se produce un nuevo cambio sociopolítico: la unificación de Grecia bajo el imperio macedónico. Por eso, los filósofos se centran en la cuestión del sentido de la vida humana, de la propia vida individual. Éste es un problema ético: cómo ordenar y hacia dónde orientar la propia vida y conducta. Para dar respuesta a ese problema, surgen múltiples escuelas de ética. Todas ellas coinciden en que el fin último del hombre es la felicidad, pero para unas ésta consiste en el placer, para otras en el dominio de las pasiones, etc.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que las investigaciones naturales y sobre el mundo humano en general no desaparecen.
La Filosofía Romana
Con la expansión del mundo romano no se produce la desaparición de la filosofía, sino una transformación en función de la mentalidad y modo de concebir la realidad de los romanos. El estoicismo romano se amplía a la teoría política, pues los ciudadanos podían participar en la vida pública y ocupar cargos de gobierno: todos podían recorrer el cursus honorum. El gran logro de la filosofía romana fue elaborar la humanitas, una teoría general del hombre, su educación y formación, de la ética y de la política. Las figuras más importantes son Cicerón (106-43 a.C.), Séneca (4 a.C.-65 d.C.) y Marco Aurelio (121-180 d.C.).
El Neoplatonismo
Dentro del neoplatonismo suele distinguirse el neoplatonismo alejandrino, ligado a esa ciudad del Mundo antiguo, con autores como Filón (primera mitad del s. I d.C.), Plotino (205-270 d.C.) o Hipatia († 416 d.C.). Pero también hay otros muchos autores importantes ligados indirectamente a Alejandría o sin relación con ella, como Plutarco de Queronea († 120 d.C.), Porfirio (232-304 d.C.), o Sinesio de Cirene († 414 d.C.). Otra corriente neoplatónica es el gnosticismo, que insiste en la idea de que la salvación se da principalmente a través del conocimiento. Ejemplo de esa corriente es el corpus hermeticum de Hermes Trismegisto. Importante especial tuvo el neoplatonismo cristiano, el nombre tampoco es muy apropiado, pero intenta reflejar que, además de ser neoplatónicos, eran cristianos o vivían en ambiente cristiano. La mayoría de ellos, sobre todo al inicio, eran paganos cultos, neoplatónicos de pensamiento, que se hacían cristianos ya en edad adulta. Así, por ejemplo, San Justino († 165 d.C.), Tertuliano († 220 d.C.) que se hizo cristiano con casi 40 años, o San Agustín (354-430 d.C.) que se convirtió pasados los treinta. El último neoplatónico de la Antigüedad es Boecio (475-525 d.C.).
Señalemos, por último, que estos autores neoplatónicos, cuando escriben de ética y política suelen ser estoicos. El neoplatonismo-estoicismo es, en general, el modo de pensar del Mundo antiguo desde que la cultura romana (por supuesto helenizada) pasara a ser la predominante.