Hebreos 2:1-4: Claves para Preservar una Salvación Invaluable

Una Salvación Tan Grande

"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, ¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad."

Exhortación

La exhortación siempre es necesaria para el creyente, ya que la vida cristiana no consiste únicamente en confesar la fe y ser bautizado. Como cristianos, siempre estamos rodeados de peligros y, mientras dure nuestro peregrinar, debemos ser en todo momento advertidos y enseñados acerca de la palabra, que es nuestra guía, para que, ayudados del Señor, sigamos fieles sus caminos. Así, podemos darnos cuenta de que en este pasaje bíblico advertimos cuatro consejos:

I. Advertencia: La Necesidad de Velar

"Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído."

1. "Considerando que Cristo sacrificó su vida por cada uno de nosotros, y en quien hemos creído y seguido este evangelio de fe, por tanto, debemos dar más atención a lo que se nos está enseñando, ya sea en el púlpito, la escuela dominical, la casa… Que Dios nos ayude, ya que muchas veces nuestra capacidad de retención es pobre. A veces, ni siquiera recordamos la palabra que se predicó el domingo pasado."
2. "Es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, aquellas que nos disciplinan, las que nos edifican, que nos fortalecen nuestra vida espiritual:

• "Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil" (Mateo 26:41).
• "Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar" (1 Pedro 5:8).

II. Advertencia: La Posibilidad de Caer

"… no sea que nos deslicemos."

1. O nos dejemos deslizar por el enemigo, derrotándonos nosotros mismos antes de iniciar la lucha:
   • O sea, que oigamos mucho y no retengamos nada.
   • Que las cosas de Dios pasen por nuestra vida como las aguas de un río que se alejan en su curso.
2. Otros ven el peligro de que uno mismo, y no tanto la palabra oída, se deslice. Ejemplos:

• Judas, apóstol del Señor, fue reprobado por sus hechos (Hechos 1:18).
• Muchos discípulos del Señor lo abandonaron: "Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él" (Juan 6:66). Y volver atrás es como volver al vómito.
• "Porque Demas me ha desamparado, amando este mundo" (2 Timoteo 4:10).

III. Advertencia: Lo Irrevocable del Decreto Divino

"Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución…"

1. "La palabra dicha por medio de los ángeles":
   • Se refiere a la ley que fue dada por mediación de los ángeles (Hechos 7:53).
2. "Fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución."

• Números 23:19 habla de lo inquebrantable de los decretos divinos: "Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo: ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?"
• Mateo 24:35: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán."

IV. Advertencia: Lo Inexcusable del Pecado

"¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?"

1. Esta salvación fue anunciada primeramente por el Señor.
2. Confirmada por aquellos que la oyeron.
3. Ratificada por Dios con señales, prodigios (señales, maravillas, fenómenos sobrenaturales), diversos milagros y repartimientos de los dones del Espíritu Santo según su voluntad. A mis hermanas con dones espirituales, trabajen para el Señor.
4. El cristiano no puede excusar el descuido de su salvación, porque ha presenciado la obra de Dios en diversas maneras.

Conclusión

Hoy se nos advierte a no perder esta bendición tan grande que es la salvación de nuestras almas, advirtiéndonos en todo momento de guardarnos fieles para su obra y que nunca desmayemos ni resbalemos en sus caminos: "Estas cosas... Están escritas para amonestarnos a nosotros... Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga" (1 Corintios 10:11-12).