Literatura Española del Siglo XIX: Romanticismo, Realismo y Figuras Clave
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La Literatura en España Durante el Siglo XIX
La literatura en España durante el siglo XIX se divide en una primera mitad del siglo, en la que domina el Romanticismo (un amplio movimiento cultural y político cuyo apogeo se produce en toda Europa), y en una segunda, donde aparecen el Realismo y el Naturalismo.
El Romanticismo en España
El año 1835, con la obra “Don Álvaro o la fuerza del sino” del Duque de Rivas, marca el inicio del Romanticismo. El retraso en España se debió a las condiciones políticas, a la represión contra los intelectuales y a la férrea censura. Muchos intelectuales emigraron, lo que los puso en contacto directo con las corrientes románticas de Europa. El regreso de los emigrados a la muerte de Fernando VII facilitó el triunfo del movimiento. En los periódicos y las publicaciones nacionales empezaron a verse reflejadas las ideas románticas, las noticias, comentarios, polémicas, etc. España se había convertido en el país de moda; nuestra historia y literatura fueron admiradas por los románticos y constituyeron una fuente de inspiración temática, siendo objeto de estudio.
Figuras Representativas del Romanticismo
- Espronceda
- Larra
- El Duque de Rivas
- Enrique Carrasco
- Zorrilla
El Realismo en España
Si tomamos como modelo Francia, es en el año 1857 (cumbre del Realismo francés) cuando aparece Madame Bovary. En España, en cambio, es a partir de la revolución de 1868, con la caída de Isabel II, cuando se publican novelas realistas de calidad literaria. La Fontana de Oro, de Galdós, en 1870, inicia una década de triunfo del Realismo en España.
Características de la Novela Realista
La novela realista pretende la reproducción fiel de la vida del individuo, al que se presenta inmerso en el ambiente y la sociedad que lo rodea. El tema sería la descripción de la realidad exterior, en contraste con la novela romántica, en la cual el “yo” del individuo y la exaltación de la imaginación tenían un papel fundamental. Las novelas contemporáneas de Galdós reflejan el interés que despierta la realidad en estos escritores, aunque a veces esté regida por leyes científicas. El determinismo científico de Zola y Balzac no llegó a regir en los novelistas españoles, que cuentan con obras importantes como Fortunata y Jacinta y La Regenta, de Clarín.
Transición al Siglo XX
Las obras de Bécquer o la poesía de Rosalía de Castro, junto con la novela realista y naturalista, serán el anticipo de la literatura del siglo XX.