Manifiesto Conjunto UGT-CNT: Huelga General por la Democratización y Mejora Laboral en la Crisis de la Restauración
Manifiesto Conjunto UGT-CNT
Contexto Histórico y Social
Nos encontramos ante un texto de carácter social y contenido político: un manifiesto firmado por las dos grandes organizaciones obreras del país, la UGT, de ideología socialista, y la CNT, de ideología anarquista. Está dirigido al pueblo español, especialmente a los trabajadores.
La fecha de publicación nos sitúa en el período de crisis de la Restauración, durante el reinado de Alfonso XIII. Una época de crisis política debido, por una parte, a la inestabilidad del propio sistema, y por otra, a la inflación originada por las alteraciones económicas derivadas de la Primera Guerra Mundial, que afectaba especialmente a las clases más desfavorecidas. A su vez, en el ejército existía un gran descontento por el auge de los nacionalismos, el empeoramiento de sus condiciones de vida y el malestar ante la corrupción política.
Idea Principal: Convocatoria de Huelga General
La idea principal del manifiesto gira en torno a la convocatoria de una huelga general por parte de la CNT y la UGT, tras intentar infructuosamente y de forma prudente una democratización del sistema y mejoras en las condiciones laborales.
Estructura del Manifiesto
El texto presenta dos partes diferenciadas:
- En la primera, se expone la situación de empobrecimiento y miseria de la clase trabajadora española, causada por el elevado precio de los productos de primera necesidad.
- En la segunda, se hace un llamamiento a la clase trabajadora para que apoye esta huelga general, de forma indefinida.
Situación de la Clase Trabajadora a Principios del Siglo XX
En la primera década del siglo XX, los obreros españoles experimentaban una situación de sobreexplotación similar a la de otros estados europeos. España se caracterizaba por malas condiciones de trabajo, sueldos bajos e inexistencia de seguros de desempleo, vejez o enfermedad.
Influencia de la Primera Guerra Mundial
A esta situación del proletariado se unió la influencia de la Primera Guerra Mundial. Los países beligerantes compraban productos a España, lo que provocó un aumento de los negocios especulativos relacionados con la exportación y los intereses de la oligarquía. Estas exportaciones eran preferentemente de productos de primera necesidad, lo cual generó una crisis de desabastecimiento y un encarecimiento de los precios en los productos básicos. Los beneficios que provocaba esta situación no revertían nunca en los trabajadores.
Crítica al Liberalismo y Alianza Sindical
Los sindicatos culpaban a los políticos de favorecer los intereses de la oligarquía. En definitiva, consideraban que el liberalismo suponía para España el enriquecimiento de unos pocos y el empobrecimiento de la clase trabajadora. Estos presionaron a través de huelgas en las que pedían mejoras salariales. La presión social favoreció la alianza entre anarquistas y socialistas.
Estas dos organizaciones sindicales tenían importantes diferencias ideológicas: la CNT defendía posturas radicales e incluso violentas como arma revolucionaria para acabar con el capitalismo y el Estado. En cambio, la UGT era partidaria del diálogo como medio para avanzar hacia una democratización real del país.
Consecuencias de la Huelga
La huelga tuvo un seguimiento masivo, pero no consiguió sus objetivos debido a la durísima represión del gobierno de Eduardo Dato, que recurrió al ejército. Después de la huelga, las diferencias entre estos dos sindicatos se agravaron y no hubo unidad de acción sindical hasta la Guerra Civil Española.