El Matrimonio y la Familia: Pilares de la Sociedad y la Fe Cristiana
Clasificado en Religión
Escrito el en español con un tamaño de 4,79 KB
El Matrimonio: Unión Sagrada y Compromiso Civil
El matrimonio es la unión para toda la vida que Dios realiza en cuerpo y alma entre el hombre y la mujer, con el consentimiento de ambos. Constituye el pilar fundamental para los hijos, la familia y la sociedad.
Ámbito Civil
En el ámbito civil, la pareja se ajusta a todas las normas, derechos, beneficios y obligaciones establecidas por las leyes. El matrimonio y la familia son pilares fundamentales para la crianza y el desarrollo de los hijos.
Ámbito Religioso
En el ámbito religioso, el matrimonio es considerado un pilar fundamental para los hijos, la familia y la sociedad. Fue instituido como sacramento de Dios, y es Él quien realiza la unión.
La Familia según la Iglesia
La Iglesia, a través del catecismo, afirma lo siguiente: Todo hijo nace en el seno de una familia. La sonrisa de los padres ayuda al niño a desarrollarse como ser humano. De la mano de sus padres aprende a andar, confía en ellos. El niño que sea privado de esto tendrá a menudo mucha dificultad para confiar en los demás y creer en el amor que se da y se recibe.
El hombre encuentra su propia identidad cuando ama, porque Dios lo creó a su imagen y semejanza. Cuando un hombre y una mujer se aman, deben prepararse. En el noviazgo profundizan su proyecto de compromiso con el matrimonio. En el Sacramento del Matrimonio, se prometen felicidad para toda la vida. Pero como se trata también del amor a Dios, hacen esta promesa en público, ante la comunidad eclesial y ante el sacerdote.
Para los cristianos, el matrimonio es una institución religiosa caracterizada por la unidad e indisolubilidad, consideración superior que fortalece y realza la dignidad y nobleza de los vínculos familiares.
Las Dos Caras del Matrimonio
El matrimonio presenta dos caras:
- Cara visible: Celebración pública. Alianza y consentimiento de los padrinos.
- Cara no visible: La unión que Dios realiza de esas personas.
Además, todo sacramento es un signo visible de algo muy profundo.
La Familia como Sociedad
La familia debe entenderse como una sociedad. Esta primera sociedad humana es el origen de todas las demás sociedades. A partir de ella se constituye la sociedad total. Además, es la sociedad más importante, por la triple función que la naturaleza le ha asignado:
- Cuna: En ella se inicia la vida.
- Escuela: Se forman los hijos.
- Lugar de Reposo: Se satisfacen necesidades espirituales y físicas del ser humano.
La institución familiar se origina de una agrupación natural. Surge de las tendencias del ser humano y sus necesidades. Además, la familia se fundamenta en el amor, que mantiene unidos a los miembros. El estado rodea a esta institución con un escudo de leyes protectoras de sus integrantes e intereses.
Familia: Grupo de personas unidas por lazos biológicos, en algunos casos afectivos, que se ayudan y contienen entre sí.
Condiciones y Derechos de la Familia
Debemos reconocer en la familia condiciones fundamentales:
- Toda familia es una sociedad en crecimiento.
- Toda familia es formadora de personas.
- Toda familia puede ser reflejo de la Sagrada Familia. Esto la hace semejante a Dios.
- Toda familia goza de derechos inalienables.
Derechos de la Familia
- Existir y progresar como familia.
- Ejercer su responsabilidad en la transmisión de la vida y educar hijos.
- Intimidad de la vida conyugal y familiar.
- Estabilidad del vínculo e institución matrimonial.
- Creer y profesar su propia fe, y difundirla.
- Educar a sus hijos con las propias tradiciones y valores religiosos, culturales.
Todos estos derechos son estudiados detenidamente por la Santa Sede, acogiendo la petición explícita del Sínodo (asamblea de Obispos).
La Misión de la Familia
La familia tiene la misión se ser cada vez más lo que es, o sea, comunidad de vida y amor en una tención que hallará su cumplimiento con el Reino de Dios. La esencia y el cometido de la familia son definidos en última instancia por el amor. Por esto la familia recibe la misión de custodiar, revelar y comunicar el amor de Dios por la humanidad.
El reciente Sínodo ha puesto de relieve cuatro cometidos generales de la familia:
- Formación de una comunidad de personas.
- Servicio a la vida.
- Participación en el desarrollo de la sociedad.
- Participación en la vida y misión de la Iglesia.
La familia es el fundamento sobre el que la sociedad y la Iglesia se apoyan.