Mitología, Arte y Sociedad: Un recorrido histórico
Clasificado en Griego
Escrito el en español con un tamaño de 3,92 KB
Mitología: Un viaje a través del tiempo
Definición y Clasificación
El mito es un relato tradicional que se refiere a dioses. Según Borges, existen cuatro mitos principales: la guerra, el viaje de regreso, el viaje de la búsqueda y el sacrificio de un dios. Otra clasificación divide los mitos en dos tipos: el del mesías, que se identifica con la fundación, y el del diablo, que se corresponde con la catástrofe. Dentro de estos dos tipos encontramos los mitos cosmogónicos (explican la creación del mundo), teogónicos (relatan el origen de los dioses) y escatológicos (anuncian el fin del mundo y el futuro).
Recorrido histórico
En la Edad Media, marcada por la cruz y la creencia cristiana, abundan los mitos de esa época. El Renacimiento cuenta con la mitología caballeresca. En el siglo XIX, el mito deriva en vampiros, Frankenstein, y lo gótico y romántico. En el siglo XX surgen mitos de universos fantasiosos, motos y leyendas, que se crean a través del cine y la televisión. Después de la Segunda Guerra Mundial, surge la mitología del miedo y el fin del mundo. En la actualidad, nuestro monstruo somos nosotros mismos: el asesino en serie, que se divide en terrorista (Bin Laden o Anders Breivik) y el monstruo extraterrestre. En definitiva, la mitología es una mezcla de ciencia, tecnología y mitos de otras épocas.
Mitos modernos
Encontramos mitos como el de Peter Pan, que no quería crecer, o el de Michael Jackson. También existen "Mitos sin causa", como la rebeldía de Elvis o los Rolling Stones. La mitología de fantasía de dioses se asocia a fantasías sexuales o extraterrestres, como la Mansión Playboy, un parque temático del sexo.
Antropología Económica: Thorstein Veblen y la clase ociosa
Veblen postula la existencia de la "clase ociosa", compuesta por los ricos que no trabajan, y la "clase no ociosa", formada por aquellos que trabajan y son considerados inferiores. Realizar cualquier actividad con un fin productivo se considera vulgar y excluye a la persona de la clase ociosa. Por ejemplo, cazar para conseguir comida es vulgar, pero cazar como hecho heroico es propio de la clase ociosa.
El ocio significa pasar el tiempo sin producir nada para demostrar que se puede permitir ese lujo. Para reflejar ese ocio, se utilizan trofeos o medallas como muestra de sus hazañas. El decoro, es decir, el saber comportarse, marca la diferenciación entre clases.
Existe también el consumo ocioso de productos caros que solo se puede permitir la clase ociosa. Cuanto más consumiera el amo estos productos, aunque fueran perjudiciales para su salud, mayor sería su posición social. Si tuviera tanto que no pudiera consumirlo todo por sí mismo, organizaría fiestas para elevar aún más su estatus. Podríamos hablar de derroche, pero actualmente un objeto puede tener una utilidad y ser a la vez un producto ostensible.
La obra de arte: Walter Benjamin y la reproductibilidad técnica
Para Walter Benjamin, la proyección que Marx hizo del capitalismo fue muy valiosa, porque demostró un problema de la época. Esto impulsó a Benjamin a proyectar la situación real que se estaba produciendo en el arte. El arte siempre ha sido copiado; los griegos ya copiaban obras masivas con su técnica de fundir y acuñar. Con el tiempo surgió la litografía, que ayudó aún más a reproducir obras de arte. Poco después apareció la fotografía, que superó rápidamente a la litografía, ya que el ojo es más rápido captando que la mano dibujando.
Una obra de arte se caracteriza por ser única e irrepetible. Por esta razón, ninguna reproducción, por excelente que sea, se acercará a la experiencia de la obra auténtica. Una reproducción manual se puede catalogar como una imitación del objeto original, pudiendo ser independientes. La reproducción técnica, sin embargo, implica la pérdida del "aura" de lo auténtico.