Cinco Obras Musicales Emblemáticas del Siglo XX: De Esplá a Williams

1. *Coplilla*: Culminación de las *Canciones Playeras* de Óscar Esplá

Dentro del ciclo *Canciones Playeras*, *Coplilla* representa la quinta y última pieza, compuesta por el alicantino Óscar Esplá en la segunda mitad del siglo XX. Este autor, figura destacada del nacionalismo musical, se inspira en la obra poética de Rafael Alberti para la creación de estas canciones. Además, se perciben influencias de compositores como Falla, Debussy y Ravel. *Coplilla* está escrita para soprano y orquesta, con un compás de 6/8.

2. *O Fortuna* de *Carmina Burana*: Una Cantata Impresionante de Carl Orff

Nos encontramos ante *O Fortuna*, la primera de las 25 piezas que componen la cantata *Carmina Burana*, obra maestra de Carl Orff. Compuesta en el siglo XX, esta pieza se caracteriza por el uso de la hemiolia, alternando un compás de 3/4 con acompañamientos binarios en 2/4. *Carmina Burana* es una cantata para coro mixto y solistas, con una importante presencia de la percusión y un ritmo variado. Aunque la obra combina alemán y latín, *O Fortuna* está escrita íntegramente en latín. Orff, reconocido pedagogo musical, utiliza elementos compositivos medievales en esta obra de estilo neoclásico. La pieza se distingue por sus cambios súbitos de pianissimo a fortissimo, extraídos de los textos del *Codex Buranus* de los goliardos. Presenta una melodía acompañada, frases cuadradas y muy rítmicas, armonía tonal y acordes por quintas paralelas. *O Fortuna* es una música enérgica e inquietante que ha trascendido al ámbito cinematográfico como banda sonora.

3. *La Guerra de las Galaxias*: Una Banda Sonora Épica de John Williams

La banda sonora de *La Guerra de las Galaxias*, compuesta por John Williams en el siglo XX, se caracteriza por una orquestación organizada por secciones rítmicas. El tempo de los metales es allegro, mientras que el de los vientos es más piano. La música se basa en una combinación de leitmotivs, creando un efecto impactante propio de las bandas sonoras. Se aprecia la influencia de *Los Planetas* de Gustav Holst en la composición.

4. *Concierto para Violín y Orquesta en Mi Menor*: Virtuosismo y Lirismo en la Obra de Mendelssohn

El *Concierto para Violín y Orquesta en Mi Menor*, compuesto por Felix Mendelssohn en el siglo XX, presenta una textura densa y una melodía de carácter virtuosístico. La obra contrasta dos secciones, una más enérgica y apasionada, y otra más lírica. La armonía está en Mi menor y el compás es binario. Su forma es de sonata, desarrollando la cadencia. El concierto comienza directamente con el violín y los movimientos se suceden sin interrupción.

5. *Estudio en Mi Mayor*: Una Pieza Pianística Emblemática del Romanticismo de Chopin

El *Estudio en Mi Mayor* de Frédéric Chopin, una obra para piano del Romanticismo pleno, se mueve entre piano y fortissimo. Presenta una melodía acompañada, un tempo binario y un comienzo en anacrusa. El tempo es lento y la forma es de lied ABA.