Origen remoto de la lengua española
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1. LENGUA ESPAÑOLA: ORIGEN REMOTO
Hablar del origen de la lengua española no es tarea fácil por no disponer de datos, sobre todo en la etapa prerromana. Solo tenemos la fecha aproximada de los primeros testimonios escritos de nuestra lengua: 'las primeras muestras escritas - por lo demás paupérrimas - de los romances hispánicos, se sitúan en el siglo X. El español oral era una lengua que primero se habla y después se escribe. Sólo nos podemos imaginar las diferencias que se irían produciendo en Galicia, León, Asturias, Cantabria, Aragón, Cataluña, Andalucía y todos los territorios del Centro. Lo único cierto es que ese 'latín vasconizado, una lengua que fueron creando gentes eusquéricas vasconizadas', en la zona de Cantabria y La Rioja, se convertiría en la lengua romance más fuerte. La presencia de un territorio en la zona oriental del reino asturleonés, denominado Castilla en el siglo IX, y su desarrollo político en alza, hizo que este romance recibiera el nombre de castellano.
2. LENGUAS PRIMITIVAS DE ESPAÑA
Denominamos así a todas las lenguas anteriores al latín impuesto por los romanos al ocupar la Península Íberica a partir del año 218 a. C. La mayor parte proceden de la lengua indoeuropea, tronco común de la rama itálica, griega, báltica, eslava, germánica, céltica, india. Otras, son preindoeuropeas como el euskera. Durante un tiempo dichas lenguas convivieron con el latín en una situación de bilingüismo hasta desaparecer lentamente, excepto el euskera. Todas ellas han dejado huella en las palabras de hoy. La evolución de las lenguas primitivas no podía ser la misma en una zona fuertemente romanizada como Andalucía y Levante que en el Norte y Noroeste, conquistados y romanizados más tarde.
3. ESPAÑA ROMANA: SIGLOS III a. C. - V d. C.
LA CONQUISTA DE HISPANIA - En su lucha contra los cartagineses desembarcan los romanos en Ampurias (Gerona) en el año 218 a. C. Comienzan la conquista de la Península Ibérica por el Nordeste y Levante, llegando a Cádiz el 206 a. C, de donde expulsan a los últimos cartagineses. La rapacidad y crueldad de algunos generales y gobernadores provocó la resistencia de los nativos: los cántabros y astures (Cantabria, Asturias y León), últimos en resistir hasta el año 19 a. C. ROMANIZACIÓN DE HISPANIA: EL LATÍN El proceso de romanización, igual que la ocupación, fue desigual; en la Bética y Levante se comenzó ya en el siglo II a. C. Fue un proceso lento. El latín ofrecía las variedades comunes a todas las lenguas del mundo: diatópicas o espaciales, diacrónicas o temporales y diastráticas o socioculturales. La inmensa mayoría de los ciudadanos del Imperio, que no iba a las escuelas, hablaba el latín vulgar del que apenas se conservan textos escritos posteriores al siglo I d. C. Sirvió para dar unidad a todo el extenso territorio del Imperio Romano, pero con el paso del tiempo se fragmentó en dialectos, las llamadas lenguas románicas o romances: aragonés, leonés, castellano, gallego, portugués EL LATÍN EN HISPANIA La implantación de la lengua latina en España sigue el mismo curso que la conquista. Todo un conjunto de soldados, administradores, comerciantes y colonos romanos, que se fue extendiendo del Mediterráneo hacia el Norte, invadió poco a poco Hispania hablando latín vulgar. Esta constatación es importante para la historia del español, que tiene sus raíces precisamente en esa zona norte de cántabros, astures y váscones, en los confines de lo que luego serían los Reinos de Asturias, León y Castilla, por un lado, Navarra y Aragón, por otro