Principios Fundamentales de la Iluminación Escénica: Exponer, Modelar y Expresar

Clasificado en Plástica y Educación Artística

Escrito el en español con un tamaño de 3,32 KB

La Iluminación y sus Tres Dimensiones

La iluminación se manifiesta en tres aspectos fundamentales: la luz para exponer, la luz para modelar y la luz para expresar.

1. Luz para Exponer

La luz para exponer se relaciona directamente con la exposición. Permite la correcta visualización de la escena y sus elementos.

Análisis de la Luz para Exponer:

  • Densidad
  • Contraste
  • Saturación

2. Luz para Modelar

La luz para modelar define cómo se perciben las formas en el espacio. Modela volúmenes, texturas y colores.

Análisis de la Luz para Modelar:

  • Forma y estructura
  • Volumen
  • Textura
  • Color
  • Brillo
  • Transparencia

3. Luz para Expresar

La luz para expresar transmite significados y emociones. Se relaciona con el contexto histórico y expresivo del estilo de iluminación empleado.

Análisis de la Luz para Expresar:

Fabrice Rebault habla de tres funcionalidades clave:

  • Legibilidad: Asegurar que los elementos importantes sean vistos.
  • Jerarquización: Diferenciar y dar énfasis a ciertos elementos sobre otros.
  • Dramatización: Utilizar la luz como elemento dramático para dar sentido a la acción.

Profundizando en la Luz para Expresar

La luz para expresar nos permite comunicar y evocar emociones a través de la iluminación. Estos tres aspectos (dramatización, jerarquización y legibilidad) son cruciales para este fin.

Dramatización

La dramatización utiliza la iluminación para dar sentido a la acción y contribuir a la narrativa.

Jerarquización

La jerarquización emplea la luz para diferenciar y dar énfasis a unos elementos escénicos sobre otros, guiando la atención del espectador.

Legibilidad

La legibilidad se refiere al uso de la luz para revelar lo que se quiere mostrar y ocultar lo que se quiere dejar fuera de atención o ambiguo.

La División del Espacio Lumínico y la Mirada

La Luz y el Espacio

La luz de un foco divide el espacio en tres categorías:

  • Centro: Zona de brillos provocados por el haz de luz.
  • Cerco: Parte iluminada que rodea la zona central.
  • Periferia: Resto de la escena no iluminada directamente.

La Mirada y el Espacio

De manera similar, la mirada divide el espacio en tres regiones:

  • Centro de atención: Donde dirigimos la mirada.
  • Cerco de atención: Lo que rodea inmediatamente al centro de atención.
  • Periferia de atención: El resto de la escena que cae dentro de nuestro ángulo de visión.

La coordinación de estas seis regiones (centro, cerco y periferia de la luz y de la mirada) puede dotar de tensión y significado a la composición de luz, espacio y forma en la fotografía.

La forma convencional de coordinar estos espacios es hacer coincidir centro con centro, cerco con cerco y periferia con periferia. Sin embargo, al alterar este emparejamiento, se pueden crear tensiones en la imagen que, al resolverse o no, aportan sentido al discurso visual.

Entradas relacionadas: