Reformas y Constitución de la Segunda República Española (1931-1933)
El Gobierno Provisional y sus Reformas
El Gobierno Provisional, integrado por los firmantes del Pacto de San Sebastián y presidido por Alcalá Zamora, implementó diversas reformas entre abril y diciembre:
Reformas Clave del Gobierno Provisional
- Militar: Azaña promulgó una ley para reducir el gasto militar y mejorar la operatividad del ejército. Se permitió el pase a la reserva de jefes y oficiales, se eliminaron cargos y se subieron los salarios de la Guardia Civil y otros cuerpos.
- Educativa: Se buscó reducir el analfabetismo construyendo escuelas, creando plazas de maestro y ofreciendo cursos nocturnos para adultos.
- Agraria: Largo Caballero estableció la jornada laboral de 8 horas, la obligatoriedad de contratar jornaleros locales, fijó el salario mínimo y prohibió desahucios, además de decretar el laboreo forzoso de tierras no cultivadas.
- Iglesia: Se eliminaron las subvenciones estatales, la enseñanza religiosa dejó de ser obligatoria y se les apartó de actividades económicas no relacionadas con su profesión. El anticlericalismo provocó la quema de iglesias y conventos, generando una fuerte oposición de la Iglesia a la República.
La Constitución de 1931
Las elecciones generales del 28 de junio de 1931 dieron paso a las Cortes Constituyentes. El PSOE fue el partido más votado, seguido por el Radical de Lerroux y el radical-Socialista. La nueva Constitución fue aprobada el 9 de diciembre de 1931.
Características de la Constitución de 1931
- Definía España como una República de trabajadores.
- Reconocía la libertad de cultos, expresión, reunión y asociación.
- Protegía los derechos de los trabajadores y permitía a la mujer ocupar cargos públicos.
- Establecía el matrimonio civil y el divorcio.
- El poder ejecutivo y el Presidente de la República eran elegidos y sus actos aprobados por las Cortes.
- La cuestión religiosa fue muy debatida, limitándose la expulsión a los jesuitas y prohibiendo a la Iglesia ejercer la enseñanza.
- Se aprobó el voto femenino, el derecho a la autonomía de municipios y regiones y la expropiación forzosa por utilidad pública.
Tras la aprobación de la Constitución, Alcalá Zamora fue nombrado Presidente y encargó a Manuel Azaña formar gobierno.
El Bienio Reformista (1931-1933)
Durante este periodo se llevaron a cabo diversas reformas, como la secularización de cementerios, el divorcio, la ley de Congregaciones religiosas y leyes de Orden público. Hubo un gran debate sobre la Ley de Bases de la Reforma Agraria y el Estatuto de Autonomía de Cataluña.
Desafíos y Conflictos del Bienio Reformista
- La oposición del Partido Radical y los Agrarios, junto con monárquicos y asociaciones patronales.
- El Estatuto Catalán fue mal visto por algunos sectores, considerándolo separatista.
- Movilizaciones de jornaleros andaluces y extremeños por la lentitud en el reparto de tierras.
- Incidentes violentos como los de Arnedo y la sublevación de la CNT en Barcelona.
- La sublevación del general Sanjurjo en Sevilla, que fracasó.
La Reforma Agraria y el Estatuto de Cataluña
- La Reforma Agraria, aunque buscaba remediar el paro y redistribuir la tierra, fue compleja y apenas se materializó debido a la falta de recursos y la oposición de la derecha.
- El Estatuto de Cataluña fue aprobado tras ser rectificado, estableciendo la Generalitat como gobierno autónomo.
Gallegos y vascos también intentaron lograr estatutos similares, pero el Estatuto Vasco fue paralizado por el nuevo gobierno de centro-derecha.
El Fin del Bienio de Izquierdas
En 1933, el gobierno de Azaña perdió apoyos, mientras las derechas se agruparon en torno a la CEDA. La lentitud en el reparto de tierras provocó levantamientos, como el de Casas Viejas. Tras perder las elecciones municipales, Alcalá Zamora cesó a Azaña y convocó elecciones generales.
Factores del Fin del Bienio
- División de la izquierda.
- Abstención de los anarquistas.
- Influencia de la Iglesia en el voto femenino.
- Fortalecimiento de la derecha.
- Giro al centro del Partido Radical.