Los Sacramentos de la Curación: Penitencia y Unción de los Enfermos
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Los Sacramentos de la Curación
El Sacramento de la Penitencia y la Reconciliación
El Nombre de este Sacramento
- Sacramento de Conversión: Porque realiza la vuelta al Padre del hombre que se había alejado por el pecado.
- Sacramento de la Penitencia: Porque implica conversión, arrepentimiento y reparación.
- Sacramento del Perdón: Porque Dios concede al penitente el perdón y la paz.
- Sacramento de Reconciliación: Porque otorga el amor de Dios que reconcilia.
Conversión y Penitencia
El Bautismo es el lugar principal de la conversión primera. La Iglesia está necesitada de purificación constante; por tanto, la segunda conversión es una tarea permanente. Esta conversión no es sólo una obra humana; es también obra de la gracia que mueve al pecador a responder al amor misericordioso de Dios.
La llamada de Jesús a la conversión y la penitencia mira, ante todo, a la conversión del corazón y la penitencia interior. La penitencia interior es:
- Una conversión a Dios con todo el corazón.
- Una ruptura con el pecado.
- Repugnancia hacia las malas acciones cometidas y dolor por haberlas cometido.
- Confianza en la misericordia y la gracia de Dios.
El pecado es, ante todo, ofensa a Dios y ruptura de la comunión con Él y con la Iglesia. El sacramento de la Penitencia y la Reconciliación expresa y realiza litúrgicamente el perdón de Dios y la reconciliación con la Iglesia.
Sólo Dios perdona el pecado. Reconciliación con la Iglesia
El Sacramento del Perdón
El sacramento de la Penitencia ofrece a los pecadores una nueva posibilidad de convertirse y recuperar la gracia de la justificación.
La celebración del sacramento implica dos elementos esenciales:
- Actos del penitente.
- Acción de Dios por el ministerio de la Iglesia.
Los Actos del Penitente
- La Contrición: Movimiento interior por el cual te arrepientes y la intención de no volver a cometer ese error nuevamente. Se hace de manera individual con Dios.
- La Confesión de los Pecados: Todo fiel llegado a la edad del uso de razón debe confesar, al menos una vez al año, los pecados graves de que tengan conciencia.
- La Satisfacción: La absolución quita el pecado, pero el pecador debe reparar el daño causado con su pecado. Se compromete a no cometer otra vez ese mismo fallo.
El Ministro de este Sacramento
Los obispos y los presbíteros, en virtud del sacramento del Orden, tienen el poder de perdonar todos los pecados.
Los Efectos de este Sacramento
Perdona los pecados, es decir, reconcilia al pecador con Dios y con la Iglesia.
La Unción de Enfermos
La Unción de los enfermos es el sacramento destinado a los atribulados por la enfermedad.
Quién Recibe y Quién Administra este Sacramento
No es un sacramento sólo para aquellos que están a punto de morir. El tiempo oportuno para recibirlo es cuando el fiel empieza a estar en peligro de muerte por enfermedad o por vejez. Sólo los obispos y los presbíteros son ministros de este sacramento.
La Celebración del Sacramento
Es conveniente que se celebre dentro de la Eucaristía. Si las circunstancias lo permiten, la celebración del sacramento puede ir precedida del sacramento de la Penitencia y seguida del sacramento de la Eucaristía. Palabra y sacramento forman un todo inseparable en la celebración de éste.
- Liturgia de la Palabra
- Liturgia del Sacramento
- Conclusión del rito
Efectos de la Celebración de este Sacramento
- El consuelo, la paz y el ánimo para soportar cristianamente los sufrimientos de la enfermedad o de la vejez.
- El perdón de los pecados si el enfermo no ha podido obtenerlo por el sacramento de la penitencia.
- El restablecimiento de la salud corporal, si conviene a la salud espiritual.
- La preparación para el paso a la vida eterna.