El Santo Entierro de Cristo por Juan de Juni: Obra Maestra del Renacimiento Español

Clasificado en Arte y Humanidades

Escrito el en español con un tamaño de 4,05 KB

El Santo Entierro de Juan de Juni: Un Legado del Renacimiento Español

Descripción de la Obra

Este grupo escultórico monumental funerario, realizado en madera policromada, representa el entierro de Cristo. El conjunto se compone de siete figuras de tamaño mayor que el natural, cada una independiente, excepto el grupo formado por la Virgen y San Juan. En el centro, se encuentra la figura de Cristo yacente; los demás personajes proceden a su embalsamamiento.

  • En la esquina izquierda, José de Arimatea muestra con gran patetismo una espina de la corona de Cristo.
  • En la esquina contraria, Nicodemo parece dialogar con María Magdalena, quien se inclina hacia el cuerpo del fallecido.
  • En el centro, se encuentra el grupo de la Virgen María.
  • Detrás de José de Arimatea, se puede ver de pie la figura de María Salomé, que sujeta un paño y la corona de espinas.

El equilibrio del conjunto es perfecto, con una distribución clásica. La figura de Cristo se erige como eje central, y los personajes secundarios se disponen a partir de él en un ritmo simétrico. La composición crea una puesta en escena teatral, precursora del Barroco. La policromía de alta calidad pictórica refuerza el dramatismo, visible en el rostro de Cristo muerto, así como en las llagas y heridas que cubren su piel.

Clasificación y Contexto Artístico

Esta obra pertenece a la escultura renacentista española, específicamente al Manierismo, dentro de la Escuela de Valladolid. Fue realizada por Juan de Juni entre 1541 y 1545. Actualmente, se encuentra en el Museo Nacional de Escultura.

Relaciones Estilísticas

Juan de Juni, escultor de origen francés y formación italiana, trabajó en Valladolid siguiendo la línea de Berruguete. Sin embargo, su estilo se distingue por un acabado más pulido, un movimiento más solemne y una expresividad patética acentuada. Sus obras principales incluyen el retablo de la Catedral de Valladolid, la “Virgen de los Cuchillos” y este grupo del Santo Entierro.

El Santo Entierro está concebido para ser visto desde múltiples ángulos, exhibiendo un gran tenebrismo escultórico y expresividad, característicos del Manierismo de Juni. A diferencia de Berruguete, el acabado es homogéneo y las figuras se contorsionan, expresando angustia interiorizada. Se observa una transición de la libertad compositiva de Berruguete a la ordenación clasicista y simétrica de Juni.

La temática se inspira en la Borgoña francesa, con autores como Claus Sluter, donde era común esta representación de Cristo depositado en el sepulcro. La influencia italiana, donde se formó Juni, se manifiesta en el tratamiento de los paños y plegados, similar a Jacopo della Quercia, y en la monumentalidad y expresión de los rostros, influenciada por Miguel Ángel (posiblemente influenciado por el grupo escultórico del Laocoonte). Esta obra sirvió de modelo para otros pasos procesionales.

Entorno Sociocultural

La escultura del Renacimiento español destaca por su originalidad, marcada por un profundo sentimiento religioso heredado del gótico, y por su expresividad. Los materiales empleados también son distintivos, como la madera policromada de pino con la técnica del estofado (aplicación de pan de oro, pintura y raspado para revelar el dorado).

Durante este período, el clasicismo se impone en la escultura renacentista, marcando la transición hacia el Manierismo. Valladolid se convierte en el principal centro artístico, y Juan de Juni, junto con Alonso Berruguete, se erige como uno de los grandes representantes de la nueva escultura española del siglo XVI.

Entradas relacionadas: