Teorías de Liderazgo: Malla Gerencial y Madurez del Empleado

Teoría de la Malla Gerencial

Esta teoría supuso un paso importante en el estudio de las conductas de liderazgo. Los líderes realizan dos tipos de conductas enfocadas a dos intereses principales: el interés por la producción o la tarea, y el interés por las personas. Se afirma que existen puntos intermedios y combinaciones de ambos intereses:

• 1.1 - Dirección Pobre: No hay interés por la tarea ni por las personas. Son situaciones donde la persona está colocada en ese puesto e intenta evitar problemas.
• 9.1 - Dirección Tarea: Alto interés en la tarea y poco en las personas. Es un estilo autoritario.
• 1.9 - Club de Amigos: Alto interés en las personas, olvidándose de la tarea. La prioridad son las personas, lo cual es habitual en organizaciones donde no prima la producción.
• 5.5 - Dirección Intermedia: Busca un equilibrio entre ambos intereses, intentando encontrar un punto intermedio entre los intereses de los trabajadores y la empresa.
• 9.9 - Trabajo en Equipo: Cuando es posible que ambos intereses, de empresa y trabajadores, estén unidos, de manera que se busca el máximo rendimiento y crear un buen ambiente y equipo.

Concepto de Madurez del Empleado

La madurez del empleado viene determinada por dos factores clave:

• Motivación: Entendida como la automotivación que tiene el trabajador para desarrollar la tarea por sí solo, sin necesidad de recompensas externas. Es el “querer” hacer la tarea porque está motivado.
• Competencia: Entendida como la formación y la experiencia que le permiten realizar la tarea. Es el “saber hacer” la tarea al estar capacitado.

Tipos de Madurez

Existen 4 niveles de madurez:

• M1: No sabe, no quiere. No tiene la competencia para realizar la tarea y no está motivado.
• M2: No sabe, sí quiere.
• M3: Sí sabe, no quiere. Sabe realizar la tarea, pero está desmotivado y no quiere hacerla.
• M4: Sí sabe y sí quiere. Es un trabajador competente que está motivado para la tarea.

Estilos de Liderazgo: Persuasivo y Delegador

Estilo Persuasivo (E2)

Si el trabajador no sabe pero sí quiere, el estilo adecuado es el persuasivo. El líder deberá tener una alta orientación a la tarea, pero como el empleado quiere aprender, también tendrá una alta orientación hacia las personas. El tipo de poder será el de recompensa.

Estilo Delegador (E4)

Si el empleado sí sabe y sí quiere, el estilo será el delegador. El líder tendrá una orientación de tarea baja, ya que el empleado ya sabe cómo hacer el trabajo. El trabajador se sentirá bien si se le delega la tarea, y el poder que utilizará el líder será el del experto.