Vida y Ministerio de Jesús: Su Misión Divina
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El Bautismo de Jesús
La primera aparición pública de Jesús tuvo lugar en el río Jordán, junto a Juan el Bautista. Jesús acudió como un israelita más para ser bautizado. Juan se extrañó, ¿no era acaso Él, el Mesías? Jesús insiste porque deseaba expresar públicamente el deseo de llevar a cabo la misión que su Padre le había encomendado.
Los evangelistas narran dos signos en el bautismo:
- El Espíritu Santo desciende sobre Él.
- El Padre le dice que es su hijo amado.
Estos signos confirman que la misión que Jesús emprende procede de Dios y que la Trinidad está comprometida.
Su Predicación
Sobre el Reino de Dios
El Reino está cerca y está entre nosotros. Se parece a un grano de mostaza, una buena semilla en el campo, y a un tesoro escondido. Lo reciben pecadores, publicanos y discípulos.
Sobre Dios Padre
El Padre es perfecto y misericordioso.
Sobre sí mismo
El Mesías, Hijo de Dios vivo, e Hijo del Hombre. Para nosotros Él es el Hijo del Hombre, que vino a salvar lo que estaba perdido, es el camino, la verdad, la vida y la luz del mundo.
Sobre la religión
Lo más importante es buscar el Reino y la justicia, cumplir la voluntad del Padre, reconocer abiertamente a Jesús entre los hombres y amarlo más que a nadie. Cumpliendo la ley seremos considerados en el gran Reino de los Cielos. Jesús no cumple muchas de las leyes de los antepasados, pues no se identifica con ellas, no está de acuerdo con lo que dice la ley cuando el templo no se usa como casa de oración. La religión es falsa cuando no cumple con la palabra de Dios, cuando es hipócrita, y cuando no alabamos como lo decimos.
Sus Obras
Vive de una forma especial: Vive recorriendo ciudades y pueblos para predicar la palabra, sobre todo en las sinagogas, aunque también concurría a las casas. Lo acompañaban los doce apóstoles y también algunas mujeres curadas de malos espíritus y enfermedades. No tenían bienes propios, las mujeres los ayudaban con sus bienes.
Perdona: Sin excluir, perdona a los paralíticos, publicanos y pecadores, tanto hombres como mujeres. Perdona porque quiere misericordia, por eso llama a los pecadores y no a los justos. Él hace siempre lo que le agrada al Padre.
Cura (les devuelve su dignidad): Cura a los enfermos, tanto niños como paralíticos, lisiados, ciegos, mudos, y endemoniados epilépticos. Cura para ayudar a las personas a llegar al Reino de Dios, para cumplir la voluntad de su Padre, haciendo siempre lo que le agrada, orando en su nombre. Lo hacía sin juzgar.
Muerte y Resurrección de Jesús
La actividad pública de Jesús resultó polémica. Al principio tuvo muchos seguidores, pero poco a poco aparecieron reacciones contrarias:
- A los fariseos y doctores de la ley no les gustaba la interpretación que hacía de las leyes judías.
- Otros se sentían decepcionados porque esperaban milagros.
- Sus mismos discípulos no entendían su mensaje, Pedro no aceptaba que tuviera que morir, Judas lo traiciona.
- No se entendía la interpretación de la ley del sábado, o que perdonara sin exigir el cumplimiento de nada.
- El Sanedrín veía en Jesús un peligro para sus instituciones.
Todo esto hizo que se creara un clima tenso en su contra, y fue cuando el Sanedrín decidió acabar con Él.
Jesús afronta el rechazo
Como Jesús reconocía las acciones que provocaba su actividad y preveía que pudieran matarlo, se prepara para ese momento:
- No cambia su mensaje ni sus obras.
- Asume la muerte como parte de su misión.
- Considera su muerte como una forma de que su misión diera frutos.
- Anuncia su resurrección porque confía en que el Padre no dejaría que todo acabara con la muerte.